De acuerdo a la encuesta de satisfacción anual realizada por Sodexo a sus consumidores, las preferencias de los extranjeros son muy diferente a la de chilenos, ellos prefieren comidas más sazonadas, menos insípidas y más energéticas en términos calóricos.
En 2019 el total de inmigrantes que residía en nuestro país alcanzó la cifra de 939.992 personas, representando el 5,02% del total de la población, según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Desde 2017, esta cifra ha aumentado en 451.421 personas, o sea, un 92,4%.
Sodexo, líder mundial en servicios de Calidad de Vida, todos los años realiza su encuesta de satisfacción a sus consumidores, y considerando el aumento significativo de comensales extranjeros, se modificaron y agregaron preguntas a esta encuesta con el fin de conocer e indagar los comportamientos alimentarios de estos nuevos consumidores en nuestro país, y así poder entregar una oferta más variada.
Esta encuesta se realizó a un total de 35.350 personas, tanto chileno como extranjeros, en 240 sitios donde Sodexo brinda servicios, en todo el territorio nacional distribuidos entre Antofagasta y Castro.
¿Quiénes son los nuevos consumidores y qué prefieren a la hora de comer?
Sobre los usuarios inmigrantes, la mayoría proviene de Venezuela (41,8%), Haití (12,36%), Colombia (10,3%) y Perú (10,3%). Y sus labores las desempeñan principalmente en industrias manufactureras, plantas de producción, centros logísticos y de distribución, retail farmacéutico (cadenas farmacéuticas), entre otros; en cargos como operarios (47,47%), administrativos (15,47%) y técnico profesional (20,79% ).
Al desempeñar estas labores, la mayoría de ellos esperan una alimentación más calórica y contundente, orientada principalmente a la guarnición, como por ejemplo; arroz, tubérculos (papas, camotes) y legumbres. Éstos son fundamentales para ellos, dado que los ayudan a sentirse más saciados y con mayor resistencia al esfuerzo físico. Que realizan diariamente. También esperan más sabor y sazón en las opciones proteicas y preparaciones más elaboradas, que le recuerden a sus comidas típicas, como carne mechada y/o con vegetales.
Los vegetales y las frutas son un elemento esencial para ellos y no lo consideran como una ensalada o postre, sino que es parte importante del plato de fondo, a diferencia de los consumidores chilenos, que optan por estos como un complemento del plato principal. Con respecto a las frutas, además de las frescas tradicionales, prefieren preparaciones fritas, como por ejemplo la banana frita, muy consumida en Venezuela y Colombia.
Consultados por nuestra gastronomía más típica, los platos que más destacan son aquellos basados en la papa y otros tubérculos. Mientras que más al sur del país, los encuestados resaltan los pescados y mariscos.
Además, indican que han descubierto nuevas preparaciones como cazuelas, carbonadas y pantrucas, entre otras. Sin embargo, consideran que gran parte de estos platos no son lo suficientemente contundentes para ellos, por lo que recurren al arroz como acompañamiento, incluso pan.
También se les preguntó por los hábitos de los chilenos que más les sorprenden, y la respuesta más destacada tenía relación con el desayuno. A diferencia de ellos, en Chile el desayuno tiende a ser la comida menos preparada de todas y a la que se le destina menos tiempo; una taza de té/café, junto con un pan y alguna fruta es la tendencia que más se repite. En Centroamérica, por ejemplo, los desayunos son mucho más calóricos (con un gran aporte de energía) y se basan principalmente en guisos, legumbres y sopas acompañados de una proteína principal y fruta natural.