Es la invitación de la viña familiar, disfrutar la nueva temporada acompañados de vinos con carácter intenso y único, donde el Norte y Sur del país, están representados por exponentes que nacen en connotadas regiones vitivinícolas, y que sorprenden a todo paladar.
Explorar diferentes rincones del país, buscando escenarios ideales para la creación de vinos verdaderamente excepcionales, ha sido el compromiso de Familia Torres desde su llegada a Chile. Y es en este viaje de descubrimiento, donde se han encontrado, no con uno, sino con múltiples lugares de características únicas, que sin duda aportan un toque singular a la viticultura.
Y es bajo el distintivo Colección de Valles, a través de su línea Cordillera, que Miguel Torres Chile presenta vinos con una personalidad varietal intensa y particular, cada uno originario de renombradas regiones vitivinícolas. Portafolio que ofrece al consumidor el concepto de ser exponentes de unas zonas exclusivas y muy extremas de Chile, que reúnen lo mejor de cada terroir para cada variedad, permitiendo entregar un producto no repetible con sello e identidad particulares.
Cordillera de Los Andes sauvignon blanc y Cordillera de Los Andes chardonnay, son conocidos representantes parte de este proyecto que motiva a Miguel Torres Chile a atreverse a producir en tierras más extremas, exponentes ideales para encantarse cuando ya se ha iniciado la nueva temporada primavera – verano 2023.
El placer de la primavera en cada copa
Cordillera Sauvignon Blanc, es proveniente de viñedos ubicados en la Región Sur, precisamente en Osorno, de suelos de origen volcánico, expuestos a climatología fría – por latitud, no por cercanía al mar-, con un buen nivel de asoleamiento y plantados en terrazas, todo lo cual permite una maduración muy lenta y pausada. Y que con su añada 2020, fue reconocido con Medalla de Platino – 97 puntos – en los Decanter World Wine Awards 2022.
Con DO Valle de Osorno, Cordillera sauvignon blanc, es un vino de color pajizo con tintes amarillos. En nariz muestra toques de hierbas, frutas cítricas y guayaba haciéndola muy elegante. En boca es fresco, filoso, con una acidez muy presente que da paso a un retrogusto lleno, que abarca toda la boca. Ideal para disfrutar con ideal junto a mariscos como ostras, ostiones, erizos de mar y pescado blanco cocinado al limón.
En tanto, Cordillera chardonnay, proviene del Valle del Limarí, es cultivado en suelo que corresponde a una terraza aluvial del río Limarí. El clima allí es templado-cálido con noches muy frías. Ubicado a sólo 29 Km. del Océano Pacífico, donde el mar hace sentir su influencia por medio de la brisa marina, que entra a diario logrando un vino de aroma fresco y frutal.
En nariz, Cordillera chardonnay, exhibe una gran complejidad aromática, muy intensa, marcada por notas minerales, florales, cítricas y lichi. En la boca es cremoso, fresco, con una acidez jugosa, intensa y cierta salinidad que imprime el sello de los suelos calcáreos del Limarí. A la hora de elegir armonías, es compañero ideal para acompañar la trucha y el salmón ahumado, también los mariscos frescos y todo tipo de pescado al horno y en salsa.
Ambos, Cordillera de Los Andes sauvignon blanc y Cordillera de Los Andes chardonnay, están disponibles en las cartas de vino de las embajadas culinarias La Bodeguita Miguel Torres, en Curicó y Vitacura. Y también en la tienda de vinos online www.grandesterrunos.cl.
